martes, 28 de abril de 2009

Una mirada hacia Cannes, el mayor festival de cine del mundo

Cada año, durante más de una semana, el mundo del cine gira su mirada hacia la costa azul, concretamente hacia Cannes, donde tiene lugar el festival de cine más importante del mundo. Desde el día trece de mayo, los directores y actores más importantes del panorama cinematográfico mundial pasearán por su alfombra roja y se podrán ver por primera vez algunas de las películas más esperadas del año. Desde SéptimoArte trataremos de dar las claves sobre esta cita ineludible para los amantes del cine.

Por Álvaro Alonso (SéptimoArte en CeroPretensiones)

La historia del festival

El nacimiento del festival comenzó a fraguarse antes del comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Durante 1939, los principales mandatarios de la Metro Goldwyn Mayer decidieron que debía crearse un festival en Francia que hiciera la competencia al recientemente creado festival de Venecia, y que de paso lo hiciera desde una perspectiva más cercana a las grandes productoras americanas que el festival italiano. Tras encargar la labor a una serie de expertos, se decidió que el lugar ideal sería Cannes. La primera edición del festival se debería haber celebrado ese año, y la Metro ya tenía preparado un desfile de estrellas por la ciudad francesa, pero el comienzo de la Segunda Guerra Mundial hizo que todo se paralizara.

Después del conflicto bélico, en 1946, tuvo lugar la primera edición del festival. En esta primera ediión no hubo un gran premio para una sola película, sino que fueron varias las que compartieron el Gran Premio del Festival, entre las que destacan títulos tan importantes como Días sin Huella (Billy Wilder), Brief Encounter (David Lean), y la gran revolución del festival, Roma, Ciudad Abierta, de Roberto Rossellini.

Desde entonces, pese a ciertas dificultades experimentadas en los primeros años, el festival comenzó a crecer de manera imparable, asentándose en un modelo que hasta hoy sigue vigente: el festival se nutre de la visita y los estrenos de los grandes directores y actores del cine mundial, mientras que al mismo tiempo se premian propuestas arriesgadas y más alejadas del circuito comercial. Fue Cannes el que dio fama mundial a François Truffaut, David Lynch, Steven Soderbergh o Lars Von Trier.

La Palma de Oro

La Palma de Oro es, junto al Oscar, el trofeo cinematográfico más conocido del mundo. De hecho, para muchos directores, ganar el máximo premio del festival es mucho más valioso que ganar la estatuilla de Hollywood. Lo cierto es que, desde que se comenzara a entregar en 1956, inspirada en el escudo de la ciudad que alberga el festival, son muchos y muy distintos los directores premiados con el máximo galardón, y no es ninguna osadía decir que es un premio mucho más abierto que los de la academia de Hollywood.

La primera película en conseguir el galardón fue El Mundo del Silencio, un documental de Jacques Cousteau y Louis Malle en 1956. Desde entonces, el festival ha otorgado el máximo premio a cintas americanas como Taxi Driver (Scorsese), Pulp Fiction (Tarantino) o La conversación (Coppola), largometrajes italianos como La Dolce Vita (Fellini) o El Gatopardo (Visconti), o películas de tan diversos países como Rumanía, Irán, México, Japón o Argelia.

La edición del 2009

Para los realizadores que presentan sus proyectos a la consideración del festival, aparecer entre los elegidos para la sección oficial es ya un triunfo. El simple hecho de estar nominado ya otorga prestigio. Sólo hay que ver que las películas elegidas siempre lo resantan en sus carteles promocionales cuando comienzan su exhibición. Además, como una gran parte de los largometrajes que se proyectan en Cannes son preestrenos exclusivos del festival, la expectación y la publicidad obtenida son muy grandes, y las opiniones de los críticos son leídas con atención por los amantes del séptimo arte.

En lo que respecta a esta edición, la sección oficial viene especialmente cargada de proyectos esperadísimos, aunque es verdad que en su mayoría son obras de directores "amigos" del festival, premiados en otras ocasiones, o al menos presentes en la sección oficial de alguna otra edición.

Así, entre los días 13 y 24 de mayo, los afortunados que asistan al festival, podrán ver, entre otras cosas, las siguientes películas:
  • Antichrist, de Lars Von Trier: El esperadísimo nuevo trabajo de uno de los directores más amados y odiados alrededor del mundo. El nuevo trabajo del danés es una historia de terror, cuyo tráiler ha dado ya mucho que hablar. Se trata nada más y nada menos que de su décima participación en el festival, en el que conquistó la Palma de Oro en año 2000 por Bailar en la Oscuridad.
  • The White Ribbon de Michael Haneke: El director que nos lo hizo pasar mal un mal rato por partida doble con sus dos versiones de Funny Games, regresa a la sección oficial con esta historia ambientada en un pueblo alemán en vísperas de la primera guerra mundial, en el que una serie de sucesos parecen indicar que alguien se está tomando la justicia por su mano.
  • Thirst de Park Chan-wook: Con el cine coreano en alza, uno de sus puntales, que nos sorprendió en 2004 con Oldboy, llega ahora con una obra que seguro no dejará indiferente a los asistentes al festival. El tráiler nos deja etrever una película de vampiros con un gran desarrollo del personaje protagonista, sin lugar a dudas, una extraña propuesta para el festival.
  • Looking for Eric de Ken Loach: El inglés es uno de los favoritos del festival. Ha estado en una decena de ocasiones y siempre se ha llevado algún premio. Su última participación, con El Viento que Agita la Cebada, le valió la Palma de Oro más discutida de los últimos años. En esta edición, nos presenta una historia amable de un hombre cuyo ídolo es Eric Cantona. Parece que el futbolista tendrá un papel importante en la cinta, que puede ser una de las sorpresas agradables del festival.
  • Taking Woodstock de Ang Lee: Aunque parezca mentira, es sólo su segunda participación en el festival. El realizador Taiwanés, responsable de Tigre y Dragón, Hulk o Brokeback Mountain, propone ahora una película basada en la historia real de un chico que, agobiado por las deudas de su familia, colabora en la organización del evento musical más importante del siglo XX
  • UP de Pete Docter y Bob Peterson: Aunque la nueva película de Pixar está fuera de concurso, se trata de una de las películas más esperadas del año y será la encargada de abrir el festival. Sus directores son también responsables de otras cintas de la franquicia como Buscando a Nemo, Ratatouille o Monstruos S.A. Desde hace unos años, las películas de Pixar suponen todo un acontecimiento, y este año no es una excepción.
  • Inglorious Bastards de Quentin Tarantino: Seguramente la llegada a Cannes de Tarantino junto a Brad Pitt será uno de los grandes momentos del festival. Es una de las películas más esperadas de los últimos años y, aunque no creo que se lleve nada, una nueva película del realizador de Pulp Fiction es siempre un acontecimiento. Nadie se querrá perder su personal vision de la segunda guerra mundial.


El acento español

La croissette, como se conoce al festival, nunca ha sido especialmente benigna con el cine español. Los éxitos más sonados los consiguieron clásicos de nuestra cinematografía como Viridiana de Buñuel (Palma de Oro) Bienvenido Mr. Marshall (premio Internacional) o Los Santos Inocentes (Mejor actor compartido entre Paco Rabal y Alfredo Landa). Fuera de estos clásicos históricos de nuestro cine, en Cannes no se han escuchado nunca muchos nombres españoles. Salvo Almodóvar, claro, que acumula en su haber un premio a mejor director por Todo sobre mi madre y uno al mejor guión por Volver, además de abrir el festival con La Mala educación.

Sin embargo, este año las cosas parecen haber cambiado. Justo cuando en nuestro país se desata el eterno debate sobre la calidad del cine español, tres películas seproyectarán en la sección oficial: Los Abrazos Rotos del mencionado Almodóvar, Maps of the Sounds of Tokio de Isabel Coixet y Agora, de Alejandro Amenábar, esta última fuera de concurso.

Los Abrazos Rotos es la única de las tres que ya se ha podido ver en cines, con buenos resultados de taquilla y críticas muy dispares. Sin embargo, no es un secreto que, sobre todo en los últimos tiempos, el trabajo del director manchego tiene mucha mejor acogida fuera de nuestro país que en nuestras fronteras. Además, se puede considerar que es uno de los directores "queridos" del festival, con lo que no es descartable algún premio.

Mucho más difícil lo tendrá la catalana Isabel Coixet, que ha cumplico con esta película su sueño de rodar en la ciudad de Tokio. Se trata de una película pequeña de a las que al jurado le gusta premiar de vez en cuando. El tema de la cinta es el habitual de los trabajos de Coixet: el amor, la soledad, los sentimientos o las relaciones de pareja, aunque en esta ocasión parece que tendrá también ingredientes de thriller.

Agora, por su parte, es una de las películas más esperadas en nuestro país, donde Amenábar cuenta sus películas por éxitos de crítica y público. En esta última película, como ya se habló en ActaDiurna, el director de Tesis nos trasladará al antiguo Egipto en una producción multimillonaria que cuenta con la estrella internacional Rachel Weisz y ha costado más de 50 millones de euros.

Así pues, todo está preparado para que en unos días comience el festival de cine más importante del mundo, con la presidencia del jurado a cargo de la actriz Isabelle Huppert y un marcado acento español.

1 comentario:

  1. Pues sí, me ha gustado mucho el reportaje.

    Me ha ayudado a comprender un poco mejor qué es Cannes y tu análisis aporta bastante luz sobre lo que va pasar a este año en la croissette.

    Muy bueno. Un abrazo.

    ResponderEliminar